BIOMECÁNICA LABORAL - OSTEOPATÍA


biomecánica laboral grupo geseme

 

 

Un buen servicio de biomecánica basa su eficacia en el estudio y análisis de las diferentes patologías osteomusculares en el entorno laboral y su posterior acción terapéutica utilizando para ello diferentes herramientas como la Osteopatía, Podología o la Ergonomía.



La técnica estructural más característica que se utiliza en osteopatía es la manipulación o también thrust, es lo que se conoce como "manipulaciones vertebrales" y que son fácilmente reconocibles por los pacientes por el característico sonido de “crujir”.

En la prestación de servicios de biomecánica que Geseme ofrece a diferentes empresas dentro del concepto Wellnes - búsqueda continua de la “lesión 0” y la mejora de la salud global del trabajador-  hemos apreciado que existen algunas dudas sobre este tipo de manipulaciones.

Por ello, Jesús Vega, biomecanicista laboral colaborador de Geseme, nos resuelve algunas cuestiones respecto a esta técnica:

 
·         ¿CUANDO SE OYE ESTE CHASQUIDO SE ESTÁ RECOLOCANDO LA VÉRTEBRA?

Claramente NO, el objetivo de esta técnica es devolver la movilidad a la articulación liberando adherencias a nivel de las carillas.

.Normalizar el tono muscular provocando un reflejo aferente para inhibir la hipertonía muscular.

.Regular la circulación local, normalizando la facilitación medular y el tono vasomotor.

·         ¿SON PELIGROSAS ESTAS TÉCNICAS?

Las técnicas deben respetar los límites fisiológicos, respetando dichos límites no existe peligro alguno. Aunque existen ciertas contraindicaciones que el osteópata conocerá.

·         ¿A QUE SE DEBE EL CHASQUIDO DE LA VÉRTEBRA?

Lo que ocurre es que durante la manipulación los huesos se separan y crean un vacío en el interior de la cápsula articular que se rellena repentinamente de aire produciendo ese sonido característico, el sonido de una implosión de aire (efecto de cavitación)

·         ¿SI NO HAY RUIDO ESTA MAL REALIZADA LA TÉCNICA?

NO. La descoaptación puede haberse producido en la fase de elastificación de fascias, por lo que no va a volver a aparecer el ruido hasta por lo menos pasados 20 minutos. El terapeuta no busca el sonido, sino la movilización.
 
La cantidad de toxinas que el paciente almacena en su cuerpo también influye a la hora del característico ruido. Después de una manipulación el terapeuta volverá a testar la vértebra para comprobar que con la manipulación ha conseguido su objetivo.