El pasado mes de noviembre algunos medios publicaban hasta 3 noticias relacionadas con accidentes laborales sólo en el ámbito de Cataluña.
Tal es el caso de la muerte de un joven de 26 años tras
caer en una galería en una mina de potasa de Balsareny, el hombre de 49 años de
Sant Gregori (Gironés) muerto al ser atrapado bajo una retroexcavadora mientras
limpiaba un terreno agrícola o el trabajador fallecido en Sant Joan les
Fonts (Girona) tras activarse la máquina de tratamiento de papel que estaba
limpiando.
Esto son solo tres
desafortunados acontecimientos en un mismo mes de los que se ha hecho eco la
prensa, pero… ¿Cuántos hay que no trascienden a los medios de comunicación? ¿Cuántos
accidentes laborales mortales o no ocurren a diario? La mayoría de ellos pueden
evitarse simplemente con una correcta aplicación de una política de prevención
de riesgos laborales y una constante adaptación de esa política de PRL a las
novedades (nueva maquinaria, nuevos empleados, reciclaje en la formación de los
empleados, etc.) que puedan ir surgiendo en la empresa.
Las empresas y los trabajos
que se llevan a cabo están en constante evolución y proceso de cambio. Algo que
ayer funcionaba puede no funcionar hoy, de ahí la importancia de concienciar
sobre la prevención de riesgos laborales como “elemento vivo” en las empresas y
no como una obligatoriedad a la que hacer frente.